Para todos los que nos apasiona la animación, mantener la mente abierta y las ganas de aprender, es una máxima para seguir progresando como profesionales. Muchas veces me han pedido consejo sobre que hacer o que estudiar para seguir creciendo como animadores. Pienso que existen muchas opciones, como el dibujo del natural, la fotografía, el teatro… En general cualquier disciplina artística puede ser un buen complemento para evitar nuestro estancamiento. Pero lo más importante de todo, no es el aprendizaje de otras disciplinas artísticas, sino crear puntos de conexión entre lo nuevo que estamos aprendiendo y el trabajo que hacemos día a día, por muy dispares que puedan parecernos. Recuerdo una charla que recibí en una clase de pintura sobre los colores fuera de paleta. ¿Qué son los colores fuera de paleta? Aquellos colores que están fuera de la gama cromática del cuadro y que inevitablemente van a llamar la atención del espectador. Si los distribuimos sabiamente por el cuadro podemos crear un recorrido visual que sirva de guía y dirija al espectador allí donde nosotros nos interese. Como ejemplo, aquí tenéis el cuadro “The Garden of Earthly Delights” de Hieronymus Bosch. El color fuera de paleta es el rojo y el pintor lo distribuyó estratégicamente por el cuadro para fijar la atención del espectador en los puntos de interés.
En pintura tenemos colores fuera de paleta para llamar la atención del espectador y en animación ¿Que tenemos? ¡Tenemos gestos! Gestos que pueden destacar sobre los demás por diferentes motivos y que sirvan para llevar la vista del espectador allí donde nosotros nos interese. En esta secuencia de Safety Last (1923), Harold Lloyd usa estos gestos “fuera de paleta” para manipular al espectador y que fije su atención allí donde narrativamente es necesario.
En el plano en el que Harold se queda solo con la chica en el despacho, ella se dirige a la mesa y por cuestiones de movimiento captaría la atención del espectador. Sin embargo, los gestos nerviosos de Harold y sobre todo, esos movimientos indecisos de anticipación antes de la caminata, hacen que el espectador mantenga su mirada en el. Son gestos que destacan sobre los demás, están “fuera de la paleta” del resto de los gestos del plano.
Más adelante, cuando presiona el botón por accidente, fijaos que no mantiene el dedo pulsado sin más. Retuerce la mano mientras pulsa el botón creando un gesto que inevitablemente llama la atención del espectador, porque es necesario que el espectador mire como presiona el botón para poder anticipar la aparición del chico de los recados. Está claro que está reforzado con un plano de detalle, pero la verdad es que sin el plano de detalle habría funcionado igualmente.
Después, cuando suelta el botón, mueve la mano nerviosamente. Son gestos que inevitablemente destacan sobre los demás y manejados sabiamente captan la atención del espectador allí donde es necesario. Al final del todo, realiza unos gestos autoritarios, que llaman la atención porque están totalmente fuera del carácter real del personaje. De una manera u otra, Harold Lloyd maneja mediante sus gestos el recorrido visual del espectador allí donde le interesa de una forma magistral.
Como veis, extrapolar conceptos de unas disciplinas a otras puede ser muy interesante y enriquecedor. Colores fuera de paleta… gestos «fuera de paleta». No debe haber una habitación estanca con cada disciplina. No creéis muros en vuestro aprendizaje… ¡Permitid que todo se conecte!